Además de ser huéspedes bienvenidos y de proteger la biodiversidad de la Tierra, las abejas son poderosos bioindicadores y nos proporcionan información importante sobre la calidad del aire que respiramos. A través de las abejas y la miel, es posible detectar la presencia de diversos contaminantes, como metales pesados, pesticidas, partículas en el aire hasta PM 0,1 y compuestos orgánicos volátiles.
Beeing se apoya en socios universitarios y laboratorios especializados para realizar los análisis y proporcionar información importante sobre el medio ambiente al servicio de la comunidad local y los ciudadanos.
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